El caso Nisman y cómo intentar voltear a una Presidenta con alto apoyo popular
Por Santiago Bibiloni - "Nisman ya no está y dejó vacía la escena mediática, que no es el ámbito natural donde se desempeña un fiscal..."
Santiago Bibiloni | sbibiloni@lmcordoba.com.ar
La Justicia debe investigar la muerte de Nisman y también los sospechosos contactos del fiscal con actores mafiosos, inmersos estos en el oscuro mundo de la Inteligencia, en los no menos oscuros y perversos grupos mediáticos dominantes e, incluso, puertas adentro de su “impoluta casa”, donde las manos del hampa suelen encontrar un mazo dispuesto a servir el juego.
Hay un fiscal muerto, una denuncia por supuesto encubrimiento contra la Presidenta en la causa Amia y un sinnúmero de actores poderosos y desesperados, entre ellos dirigentes políticos, empresarios mediáticos, periodistas y funcionarios judiciales, que buscan destituir a un gobierno favorito a ganar las elecciones presidenciales de octubre próximo. Y esto, por supuesto, sería lapidario para los siempre miserables intereses corporativos que los nombrados más arriba representan.
Nisman ya no está y dejó vacía la escena mediática, que no es el ámbito natural donde se desempeña un fiscal, pero él la eligió -por motivos que algunos sabrán de sobra- y así se sumó a “una familia” dedicada a detractar, con mentiras y tergiversaciones- la imagen del Gobierno.Entonces se precipitó el momento de la verdad: habla por él su expediente presentado ante un juzgado. Y el expediente tiene pocas cosas que decir y las que dice son jurídicamente insustanciales.
¿Qué queda? Una operación golpista al descubierto y escuchas telefónicas donde hay conversaciones de un par de dirigentes afines al kirchnerismo y que ¡oh casualidad! llegaron a las manos del Grupo Clarín vía directa desde los despachos judiciales que entienden en la causa.Conclusiones: 1- Clarín y sus vasallos (en los medios de Córdoba hay a montones) están nerviosos. 2- Nisman víctima no es inocente en la causa que investiga el porqué de su muerte.
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